jueves, 28 de marzo de 2013

The Damned United

Un entrenador irrepetible
Un hombre dijo una vez: "Dicen que Roma no se hizo en un día. Pero yo no estaba dirigiendo aquel trabajo".

Puede que muchos de vosotros ya hayaís oido hablar de Brian Clough, pero para los que no, he escrito este artículo con motivo de la película que le da nombre, pelicula que vi recientemente, y que os recomiendo sin dudar.

Brian Clough fue, considerado por la mayoría de los británicos, el mejor entrenador ingés de la historia, un hombre verdaderamente peculiar. Un hombre que consiguió llevar a dos clubes de provincias a conquistar Inglaterra, y en el caso del Nottingham Forest, a conquistar Europa; un hombre con un sinfín de frases célebres (sus sonoras declaraciones llenaban los tabloides británicos); un hombre que no dejaba indiferente a nadie provocando la admiración y el odio a partes iguales (un poco al estilo de Mourinho); un hombre único.

Nació en Middlesbrough en donde destacó como gran goleador hasta el punto de llegar a debutar con Inglaterra. Tras una grave lesión tuvo que retirarse con tan solo 29 años iniciando una meteórica carrera en los banquillos.

Estuvo acompañado durante la mayoría de su trayectoria por Peter Taylor, posiblemente el segundo entrenador más conocido de la historia. Taylor fue su gran amigo y aliado, un hombre que tenía un ojo clínico para los fichajes, un hombre que dependía de Clough y del que Clough dependía.

Empezaron su carrera en el Hartlepools United, un modesto club de cuarta división en el que duraron alrededor de dos años. Cogieron el equipo ya iniciada la temporada en puestos de descenso, salvándolos agónicamente; en la siguiente temporada terminaron en octava posición. Aunque el equipo mostraba síntomas de mejoría, la mala relación de Clough con el presidente haría que los despidieran a comienzos de año. Durante esta etapa hicieron debutar a un joven John McGovern, un hombre que les acompañaría a lo largo de toda su carrera y que levantaría la Copa de Europa catorce años más tarde como capitán del Forest.

Derby County
El Derby County, un equipo mediocre que llevaba 10 temporadas consecutivas en segunda, apostó por ellos, fue la mejor decisión de su historia, despedirles, la peor. En la primera temporada llevaron a cabo una gran revolución, el ojo clínico de Peter Taylor sirvió para realizar algún fichaje acertado y sentar las bases del equipo, aquel año finalizaron decimoctavos. Al año siguiente en cambio, ya con McGovern en el equipo, ascendieron a la First Division.

Aquí fue cuando empezó la dura rivalidad entre Clough y Don Revie (entrenador del todopoderoso Leeds United en aquella época). En un partido de copa, cuando el Derby estaba aun en segunda, el Leeds jugaba en Pride Park. Clough estaba emocionado ya que venía el mejor entrenador del pais, un icono para él; sin embargo los jugadores del Leeds mostraron una prepotencia inimaginable, ganaron el partido con "trampas" (juego sucio y decisiones favorables del colegiado) y Revie ni siquiera saludo a Clough al final del choque. El joven técnico le dijo a Taylor que se vengarían, y que para hacerlo lo primero era ascender.

A su tercera temporada en primera obtuvieron el título liguero superando al Liverpool y al propio Leeds por un estrecho margen, sin embargo, lo que debía ser el comienzo de una dinastía (o algo que se le pareciese) se convirtió en el principio del fin. La relación de Clough con el presidente del Derby, Sam Longson, era cada vez peor; las polémicas declaraciones de este unido a los fichajes a traición (Clough contrató a varios jugadores a espaldas del consejo, lo que tensó aun más las relaciones a pesar de que la inmensa mayoría de ellos se convertían en grandes aciertos del ojo clínico de Taylor) hicieron que la cuerda se fuese rompiendo poco a poco.

Aquella temporada el Derby jugó la semifinal de la copa de Europa ante la Juventus. El fin de semana anterior al partido se enfrentaban al Leeds de Revie. El presidente pidió a Clough que jugara con los suplentes, pero este, obcecado por su rivalidad con Revie, jugó con el once titular; el Leeds jugó un partido muy sucio lesionando a varios jugadores locales. La semana siguiente cayeron 3-1 en Turin en un partido lleno de polémica (se vio a un jugador alemán de la Juventus entrar al vestuario del colegiado, también alemán, en el descanso), dos jugadores clave, Gemmil y McFarland, fueron rigurosamente amonestados perdiéndose así la vuelta. Clough realizó unas duras declaraciones cargando contra el presidente, el Leeds  y el futbol italiano en general que estuvieron a punto de costarle el cese. En la vuelta, con un equipo lleno de reservas empataron a  0 fallando incluso un penalti.

El presidente trató de despedirle pero no logró suficiente apoyo del consejo. Clough, procurando recuperar el terreno perdido, presentó su dimisión (a espaldas de Taylor) creyendo que esta sería rechazada, sin embargo fue aceptada por el club. Los jugadores y la afición se manifestaron en contra de esta decisión pero ya no había marcha atrás. Así terminaría la más gloriosa etapa del Derby County.

Leeds United
Clough y Taylor ficharon por el Brighton & Hove Albion que les ofrecía un gran salario y un proyecto de futuro. Pero Clough no duró mucho en el cargo ya que recibió una oferta para entrenar al Leeds (Don Revie había dejado el cargo para entrenar a la selección). A Taylor no le pareció ético, por lo que sus caminos se separaron. Su aventura en Yorkshire duró 44 días. En su primer entrenamiento declaró: "Hasta donde yo se, podeís tirar todas esas medallas que habeís ganado estos años a la basura, ya que ganasteis todas ellas robando". Sin Peter Taylor y con la afición, y sobre todo, con los jugadores en contra no fue capaz de durar más de mes y medio al frente del club.

La película "The Damned United" habla sobre esta experiencia en Leeds, de su rivalidad con Revie y de su anterior etapa en Derby.

Ha su salida declaró: "Hoy es un día espantoso... para el Leeds United". La prensa declaró que era su fin, Don Revie había ganado (al fin y al cabo no fue capaz de suplirle en Leeds, siendo Revie además el elegido para el puesto de seleccionador nacional, puesto que Clough siempre añoró y nunca consiguió); pero se equivocaron...

Nottingham Forest
Clough fichó por otro equipo mediocre de la segunda división, que en aquel momento iba en decimotercera posición, el Nottingham Forest. Como primera medida, como siempre, ficharon a John McGovern y a O´Hare, a los que también se había llevado a Leeds. Tardó un tiempo en amoldarse al equipo y a la categoría, pero en su tercera temporada Taylor volvió a unírsele (habían hecho las paces tras el despido del primero de Leeds) tras acabar su aventura en Brighton. En su primera temporada juntos consiguieron el ascenso a la First Division.

En su regreso a primera ficharon a jugadores como Peter Shilton (portero que jugaría más de 100 partidos con la selección) o Gemmil, que unidos a los jugadores ya presentes (jugadores como McGovern, Robertson, O´Hare u O´Neill) armarían un equipo campeón.

Durante la primera temporada en primera el Forest obtuvo el doblete al ganar la copa de la liga al Liverpool (1-0) y el campeonato doméstico sacándole 7 puntos a los reds. Durante este periodo el club se mantuvo imbatido durante 42 jornadas consecutivas, récord que se mantuvo hasta que el Arsenal de los invencibles (equipo del que espero hablar en el futuro) lo superó allá por el 2004. El segundo milagro de Clough se había llevado a cabo; pero no iba a acabar ahí.

La temporada siguiente el ojo clínico de Taylor volvió a hacer de las suyas y ficharon al delantero Trevor Francis a cambio de un millón de libras (primer jugador inglés por el que se pagó esta suma). El equipo finalizó subcampeón de liga (el Liverpool de Paisley se impuso), pero reconquistó la copa de la liga y llegó a la final de la copa de Europa. Su temporada en Europa fue magnífica, llegando a la final tras eliminar, entre otros, al Liverpool. La final se disputó en el Olímpico de Munich ante el sorprendente Malmoe, a quien derrotó por 1-0 con una solitaria diana de Francis; Taylor había vuelto a acertar.

Revalidar el título de campeón de Europa es de las cosas más difíciles que hay, pero Clough y Taylor lo consiguieron. La temporada siguiente además de volver a ganar la copa de la liga, llegaron a la final disputada en el Santiago Bernabeu en donde les tocaría enfrentarse al todopoderoso Hamburgo de Kevin Keegan y Felix Magath (que entre otros, había eliminado al Real Madrid). El resultado fue de 1-0 a favor de los ingleses con un solitario tanto de John Robertson y una gran actuación del guardameta Peter Shilton. De este modo el Forest se convirtió en el primer (y único) club que posee más copas de Europa que campeonatos domésticos.

La edad de oro acabaría ahí, algunos jugadores clave (como Francis) se marcharían a otors clubs pero sobre todo, Taylor decidió seguir con su carrera de primer entrenador marchándose al Derby County fichando además a John Robertson (pieza clave en el Forest); esto molestó muchísimo a Clough quien no volvería a hablar con su otrora mejor amigo. Peter Taylor murió repentinamente en Mallorca cuando se hallaba de vacaciones con su familia en 1990. Cuando informaron a Clough, este se encerró en su cuarto y lloró durante días, su mejor amigo se había ido para siempre.

El carismático entrenador permanecería en Nottingham 18 años. Gano alguna copa más, pero no volvería a atemorizar a Europa. Su hijo Nigel (hoy en día entrenador del Derby County) jugó en el Forest durante años, convirtiéndose en el segundo máximo goleador de la historia del club. En 1993, con Clough ya víctima del alcoholismo, el histórico conjunto inglés descendería a la segunda división retirándose su entrenador a final de temporada.

Brian Clough murió en el 2004 a raiz de un cáncer de estomago. Los últimos años de su vida fueron una época de sufrimiento a raiz de una vida marcada por el alcohol. A su funeral asistirían decenas de miles de personas.

Fue un entrenador magnífico. Sus jugadores no eran grandes estrellas, pero sus equipos jugaban como un bloque, sabía sacar el máximo provecho a jugadores que se creía perdidos (con la inestimable colaboración de Taylor) y era un gran motivador. En Nottingham y Derby es toda una leyenda.

A lo largo de su carrera dejó varias declaraciones para la posteridad. Aquí os traigo algunas:
  • "No digo que sea el mejor entrenador de Inglaterra, pero sin duda soy el primero de la lista".
  •  "¿Si me considero el hijo de dios en la tierra? No, ese es mi hijo".
  •  "Dicen que Roma no se levantó en un día. Pero yo no estaba dirigiendo aquel trabajo". 
  •  "Yo soy un entrenador con el que se puede dialogar. Si discuto con un jugador, ambos nos sentamos, hablamos sobre el asunto, y acabamos decidiendo que yo tenía razón".
  •  "Si dios hubiera querido que jugáramos al fútbol como los ángeles habría puesto cesped ahí arriba".
  •  "John Robertson era un jugador reálmente muy poco atractivo. Si un día me encontraba un poco mal me sentaba a su lado. Parecía el maldito Errol Flynn ese de las narices. ¡Ahora!, en cuanto le cedían un metro de cesped, John era un artista. El Picasso de nuestro deporte".

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